Ricardo Valenzuela
Para lograrlo invertí en locuras
Ese gran poder para conquistar
Y de inmediato procedí rescatar
Mi reina del pozo de amarguras
Pues yo con mis viejas diabluras
Con magia la había secuestrado
Pues todo estaba ya considerado
Y con gusto pagaría las facturas
Y señalando las grandes alturas
Yo con gran premura me la llevé
Rebosando amor así le entregué
Ese rincón para las almas puras
Ya sin tantas prisas y premuras
Le aseguré para ella construiría
Bello castillo donde la coronaría
Residencia para almas maduras
Y sin las noches negras y oscuras
Sin barrotes de esa oscura prisión
Y para ese tan agraviado corazón
Yo curaría sus profundas ranuras
Y perderíamos nuestras corduras
Y alejarnos de ese maldito averno
Donde priva el sufrimiento eterno
Domicilio de tantas crueles figuras
Yo ya no caminaré rutas inseguras
Solo caminos reales nadie tropieza
Sin asaltantes ocultos en la maleza
Y ya nunca caminaré con premuras
Mi reino está allá entre llanuras
Ella ahora es reina y gran señora
Como canto invasor de ave canora
Ella lo llena con belleza y ternuras
Bendecirá tierras y serán seguras
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