Ricardo Valenzuela
Quisiera el mundo fuera muy diferente
Quisiera el hombre fuera más fecundo
Quisiera un pensamiento más profundo
Quisiera formar ese nuevo precedente
Quisiera tener un potente instrumento
Quisiera con él formar nueva tendencia
Quisiera fuera de todos la consecuencia
Quisiera que ello fuera gran nacimiento
Quisiera el nacido sea gran alzamiento
Quisiera corrieran los fuertes caudales
Quisiera la avenida de valores morales
Quisiera la creciente sea el testamento
Quisiera allí se escribiera el argumento
Quisiera convertirlo en una advertencia
Quisiera se transformara en la herencia
Quisiera que fuera inicio un lanzamiento
Quisiera un mundo libre del cargamento
Del pesado castigo injusto tan desalmado
Quisiera el hombre ya no fuera agraviado
Quisiera ya nunca lo invada el desaliento
Quisiera terminara la ruta tan sangrienta
Quisiera ya nunca surjan héroes suicidas
Quisiera despierten esas almas dormidas
Quisiera ya no haya guerra y su violencia
Quisiera encontrar el ansiado salvamento
Quisiera comandar el ejército de patriotas
Quisiera recuperar tantas ilusiones rotas
Quisiera dejáramos de vivir en el lamento
Quisiera nunca dejar ese futuro desatento
Quisiera regresar aquel paraíso terrenal
Donde ya no existían los pecados capitales
Y tampoco esas nuevas conductas fatales
Ni esa prisión nazi de los señores globales
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