La conocí una noche en la posta del camino
Iluminó mi senda que ya estaba tan oscura
Se convirtió en mi cielo, mi aire y mi locura
Y sometió mi voluntad como lo hace el vino
era muy alta, elegante caminaba cual felino
Sus ojos azules como el cielo en primavera
Distinguida, segura, inteligente, aventurera
Faro de luz y capitana de mi andar genuino
Yo era un hombre maduro ya de gusto fino
Me enamoré solo al verla así, simplemente
Me rescataba del pasado hacia el presente
Como una fuerza celestial que así intervino
Caminó hacia mí seria y me dijo; yo adivino
Que nosotros conjugaremos muchos sueños
Haremos un pacto y unir nuestros empeños
Dame tu mano que ahora serás mi peregrino
No desconfíes que es algo que yo dictamino
Iremos juntos y seré tu obediente pasajera
Sin mi fe tan grande yo nunca me atreviera
Es lo que siento y mi sentimiento es genuino
Ahora yo te doy la mano y serás mi beduino
Y nuestro recorrido nunca será algo casual
Los dos sabemos será bello y trascendental
Porque el sentimiento es potente y cristalino
Así sería toda la vida de un amor clandestino
También gran acierto de un hombre demente
Un amor que todavía continúa vivo y vigente
Amándola sigo siendo su obediente inquilino
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